viernes, 17 de agosto de 2012

Tana Toraja

08-13/08/2012 Rantepao (Tana Toraja)
Rantepao es el centro neurálgico de la cultura Toraja y donde todos los turistas, esta vez los españoles ganábamos por mayoría ;D , reposábamos las emociones vividas durante el día. La cultura Toraja no deja indiferente. Hemos conocido a gente que le encanta y a otros que les disgusta profundamente, pero de un lado u otro, te emociona.
Los paisajes son hermosos y la gente amabilísima. Volvemos a las terrazas de arroz, las altas cumbres protegidas por indomable selva y los paisajes abrumadores. La cultura y la tradición se anteponen a la religión por estas tierras y allá donde mires, habrá un búfalo cerca. El búfalo es el animal de mayor importancia. Cada 6 días hay el mayor mercado de Indonesia, de compraventa de estos pacíficos animales.
La mayor atracción de Tana Toraja son sus ritos funerarios. Pueden llegar a durar hasta una semana y los turistas son siempre bienvenidos. Toda la vida de las gentes de aquí, gira alrededor de estas ceremonias. Es tan importante para la familia que sus seres queridos tengan un buen funeral, que guardan a sus muertos en casa, hasta que ahorran el suficiente dinero para poder costearle una ceremonia apropiada. Lo cual puede ser en años. La muerte como tabú u oscuridad, no tiene cabida aquí. La muerte forma parte de la vida y las ceremonias las ocasiones para juntar a la familia.
Las ceremonias funerarias son de varios días: el primero es el día en que se recibe a los invitados. Las diferentes familias “desfilan” con sus donaciones para el muerto: cerdos o búfalos. Cada día hay sacrificios de animales, siendo el último día el que hacen la mayoría de los sacrificios y, dependiendo de la familia, una pelea de búfalos. A nosotros, los sacrificios nos impactaron mucho y aunque quisimos verlo (hay turistas que no quieren), luego nos quedamos con mal cuerpo. Las peleas son algo curioso, parece que no vaya mucho con los búfalos. Ellos están tranquilos, remojándose en el barro, mientras cientos de personas gritan a su alrededor, cada vez que se acercan. Normalmente, al cabo de un tiempo, sí se pelean y el perdedor sale huyendo por donde pueda, mientras todo el gentío que encuentra a su paso corre a resguardarse. Nos contaron que los búfalos normalmente van hacia la gente en busca de ayuda. ¡Pobres ingenuos! Después de ver las ceremonias, tu visión de estos pobres animalillos cambia y aunque sean enormes, ves en lo pequeños y débiles que se convierten al lado de los hombres.
Años atrás, una vez finalizados los funerales, la gente era depositada en las rocas. Allá aguardaban a la eternidad, contemplando los campos de arroz que, durante la vida, sembraron. Hay algunas tumbas que se encuentran expuestas (como las de la foto) y otras que están dentro de cuevas. Te dan una lámpara de petróleo y al libre albedrío. Allá andábamos Karla, Gui, Ixai y yo a lo Indiana Jones dentro de una cueva infestada de arañas. Cuando era yo la que lideraba el grupo, sentía temor cuando la lámpara no estaba cerca. Los otros no parecían tener tantos problemas. Ixai era el que normalmente nos guiaba y valoraba la facilidad de paso. En esas andábamos cuando nos encontramos a un grupo de indonesios, los primeros de todo el camino; y de repente se hizo la oscuridad en nuestra zona. Gui, que era el que llevaba en ese momento la lámpara, al saludar a nuestros recién adquiridos compañeros de aventuras, se resbaló rompiendo nuestra fuente de luz. Los espiritus de todos los enterrados allí velaban por nosotros y nos otorgaron a los indonesios con su luz que, muy amablemente, nos guiaron hasta la salida. Aquel día, fueron nuestros salvadores. Sólo pensar en tener que recorrer todo el tramo de cueva hasta la salida, sin luz, se me ponen los pelos de puntas. La suerte corrió de nuestro lado.
Aparte de lo interesante de la cultura y de los paisajes, Rantepao ha sido verdaderamente especial para nosotros. Hemos compartido estos días con gente majísima. Llegamos con una pareja de franceses majísimos, que ya mencionamos antes: Gui y Karla. Con los que hemos hecho todas las excursiones y al llegar al hotel, el pequeño rellano que compartíamos siempre se llenaba con nuestras charlas. Al par de días, se unieron una pareja de mallorquinas y un chico barcelones. El poder hablar en castellano y estar rodeado de gente maja es todo un punto. ;D Éramos como una cuadrilla y cuando poco a poco, se ha ido desmembrando ha sido una lástima, aunque así es la vida del mochilero. Desde aquí les deseamos a tod@s que les vaya bien el resto del viaje y coincidir en algún otro punto de la geografía mundial. ;D
Aunque Rantepao también ha tenido su parte mala. He estado enferma unos 3 días del estómago, aunque entre los cuidados de Ixai y Karla, me recuperé finalmente y espero que mi estómago tenga la decencia de comportarse hasta estar en casa y haber comido los canelones de la yaya. ;P Esperemos. Los guías son otro aspecto complicado aquí. No te puedes fíar. De 3, 2 nos salieron rana... una lástima. Para los que vengáis, consultad el listado de guías oficiales.
P.D. Los amantes de los animales, al venir aquí, deberían dejar su sensibilidad en casa.
P.D.2. No publicamos las fotos más impactantes para no herir sensibilidades. Si alguien siente curiosidad, pedírnoslas. ;))

Los amigos y familiares del difunto cantan y bailan en corro, las bondades del fallecido.

Nunca sabes quien puede ser tu mejor amigo.



En nuestra excursión pasamos por sitios hermosos, como este. ;D



Del algodón nace el hilo.



Las típicas casa toraja, muy similares a las Batak.

Ixiana Jones

Los salvados con los salvadores.

Las tumbas en las rocas

En el mercado de búfalos, con un búfalo alvino; los más valorados.

El transportador de cerdos, un trabajo muy bien pagado.


Nuestra cuadrilla inesperada

El desfile de familias presentando sus aportaciones.


Islas Togean

04-07/08/2012 – Togean islands

Después de la experiencia en Gorontalo, las islas Togian era justo lo que necesitábamos. Nos alojamos en el Sunset Beach porque ya en el ferry nos lo “vendieron” como un sitio tranquilo y barato. Al final, no resultó ser tan barato, pero llegamos a un acuerdo y ambas partes quedamos satisfechas. La ubicación era paradisíaca: 5 bungalows en la playa rodeados de mar y jungla. Nada de mezquitas cerca, no tenemos nada en contra de ellas hasta que llegan las 3 de la mañana y sus altavoces empiezan a despertar a musulmanes y no musulmanes para rezar con los cánticos y rezos del Corán, es algo muy interesante pero una vez vivido, podemos prescindir. ;D

Una de las mejores cosas de los bungalows es que cada uno tenía su propia hamaca. Como no somos de estar tumbados en la arena quemándonos, (no, gracias, el Sol para otros), cuando nos cansábamos de nadar, a leer a la hamaca. Los pequeños inconvenientes de los bungalows tan paradisíacos en la jungla es que estás en territorio animal, con lo que era habitual encontrar arañas (y no hablamos de las arañitas domésticadas que puedes encontrar en alguna casa antigua de pueblo, noooo!!!) en el baño o en la habitación, hasta en la cama dentro de la mosquitera encontramos un par... ¡Desastrus maximus! Aunque, poco a poco, mi temor a ellas va disminuyendo, ya que a mayor contacto, mayor conocimiento y menor temor.

Mirarás donde mirarás era igual, jungla, mar, islotes cubiertos de árboles o rocas gigantes. El paisaje era mucho más bonito que el de Bunaken. Aunque el snorkel no resultó ser tan bueno, cosa que Ixai lamentó especialmente los primeros momentos. Se le pasó pronto, descubrió que había otro tipo de bichos como cangrejos gigantes y sus preferidos estos días: langostas. Así que ya desde el primer día iba rastreando todas las rocas en busca de alguna langosta que se dejara ver, sin mucho éxito, pero encontró varias morenas y una serpiente de mar; que no está nada mal.

Nuestra rutina diaria volvía a ser de relax en estado puro. Después de comer, en el hotel te ofrecían la posibilidad de hacer una pequeña excursión en bote para hacer snorkel. El primer día nos llevaron a un sitio que sin más, pero el segundo nos llevaron al lago de las medusas. Es un lago de agua caliente, sin apenas visibilidad y lleno de medusas y gusanos. Sí, parece un poco asqueroso y lo es, pero este tipo de medusas no pican, así que resultaba curioso poder tocarlas y cogerlas. Al principio, nos daba un poco de cosa, yo era más recelosa, después de que un coral me picara, ya no me fío de nada... pero Ixai enseguida se lanzó a tocarlas y cogerlas; y poco a poco, yo le imité. Así descubrimos cuán sabia fue la naturaleza en dotar a las medusas de algún poder contra los humanos. Sus gelatinosos cuerpecillos harían las delicias de los niños y los no tan niños.

Es curioso llevamos más de un mes viajando y todavía cuando la gente nos ve, nos dice si acabamos de empezar el viaje... por nuestro tono de piel lechoso... '¬¬ Conocemos a un montón de nórdicos, normalmente, más blancos que nosotros, vale, igual de blancos y ellos se ponen ultra bronceados en un par de días y nosotros seguimos lechosos, lechosos chocolateados, pero lechosos al fin... Y eso que nos hemos quemado un par de veces... ¿Cómo puede ser? :O

¡Besotes y más besotes!

nuestras camas en el ferry









miércoles, 15 de agosto de 2012

Gorontalo

01-03/08/2012 – Gorontalo

Gorontalo iba a ser una ciudad de paso, entre el bus desde Manado y el ferry hasta las Togean islands, pero como las cosas no siempre salen como uno espera... El ferry resultó ser el martes en vez del miércoles, con lo que nos vimos obligados a quedarnos 3 días en esta ciudad de paso sin un sólo turista (al menos que hayamos visto). Mala suerte, buena suerta... ¿quién sabe?

Comprando las provisiones para apalancarnos en el hotel con nuestros libros y nuestra recién adquirida filmoteca, conocimos a Kiki. Un indonesio majísimo que ha cambiado nuestra visión de Gorontalo, y nos han enseñado el significado de la palabra hospitalidad. Subidos los tres en su moto, algo muy habitual aquí, nos enseñó su Gorontalo. Dista mucho de la que nosotros podríamos haber llegado a ver. El primer día nos llevó a una sede gubernamental y a sus dos casas, la de su mujer y la suya. En ambas fuimos recibidos con mucha curiosidad y cariño. En la casa familiar de su mujer, nos invitaron a sentar en el “porche” donde a los pocos segundos ya nos envolvían unas 30 caras inspeccionando todas nuestras palabras y gestos. Todas eran de familiares y vecinos. La misma reacción pero en menor medida despertamos en su casa, donde su abuela nos miraba con cierta distancia pero mucho cariño. ¡Ai cuanto cariño había en esos ojos! Cosas de abuelas suponemos.Hablando, riendo e intercambiando curiosas miradas (la curiosidad era mútua) pasamos la tarde y a petición de la buena de su abuela, acordamos quedarnos a dormir allí al día siguiente. Y así empezó la historia más real y quitaprejuicios de las que hayamos vivido aquí.

Al día siguiente, ya desde por la mañana nos submergimos en la vida local de Gorontalo. Estuvimos jugando con plantas que hacen burbujas (¡acojonante!), fuimos al mercado a comprar la cena y luego la preparamos entre todos. La abuela y su nieto Kiki eran los jefes de cocina y el resto los pinches. La cultura indonesia y musulman es muy distinta a la nuestra. Nos sorprendía ver como siempre había algun vecino o tío o primo cerca y como los núcleos familiares son mucho más amplios que los nuestros. Ya nos advirtieron que a las 3 de la mañana desfilarían los tambores despertando a los niños para comer, antes del amanecer y cómo los rezos desde las mezquitas se les unirían algo después. Nuestros tapones resultaron insignificantes para ellos, lo que significó abandonar el sueño profundo y pasar a manos del duermevela, esperando a que la mañana despuntara. También nos llamó la atención cuán flexible resulta ser su religión. Pese a que por la calle siempre viéramos a las féminas, sin importar edad, ocultando el cabello y la mayoría del cuerpo; una vez cruzado el umbral de su casa, sin importar quién hubiera; no sabrías distinguir entre mi vestuario y el suyo. Y no sólo en casa, sinó por el mercado y las calles colindantes no se veían velos y sí muchos hombros, brazos y piernas femeninos descubiertos. Imaginamos que no en todos sitios existirá tanta flexibilidad.

En estos dos días aprendimos un montón de la cultura indonesia y de los musulmanes, y aunque no siempre compartamos los puntos de vista, nos alegramos de ser un poco menos ignorantes. ;D

¡¡¡Besooooosss y abrazooooss!!!! 

En frente la sede gubernamental


Kiki enseñándome a hacer pompas. Yo muy concentrada y él descojonado...

Fábrica de Tempe

Ixai cocinitas

Kiki dando instrucciones a un par de sus pinches. ;D



Aunque parezca mentira, ellas están comodísimas así. '¬¬ Nos encanta esta foto.





La familia
 

sábado, 11 de agosto de 2012

Bunaken

28-31/07/2012 - Pulau Bunaken
Bueno, bueno, bueno, ya hemos llegado a Sulawesi!! ¡¡Yuuppiiiiiii!! Después de día y medio de viaje, llegamos a Manado. Aún estando hechos polvo y con ganas de ducha, lo primero que percibimos es el olor a flores, hierbas... naturaleza, ya desde el aeropuerto. Sulawesi pinta muuuyy bien.
Bunaken es una pequeña isla que Ixai ha rebautizado como "el paraíso". Pensamos que ese nombre le va muchísimo mejor. ;D Estos días aquí han sido los primeros de verdadero relax. Todos los alojamientos son con pensión completa por lo que nuestro día a día consistía en: levantarnos, desayunar, bucear, comer, siesta, bucear, ducha, cenar, peli y dormir. ¡¿Suena bien, eh?! Nadie que te dice: "mister, transport??", nadie que quiere venderte nada, no tener que pelear por el precio de nada, ni preocuparnos por donde comeremos hoy, nada. Sólo relax.
Y lo mejor es que cuando hablamos de bucear, hablamos de uno de los mejores sitios ¡del mundo! Y haciendo snorkel ves prácticamente lo mismo que buceando. A sólo 50 metros de la playa, todo el suelo está cubierto de coral y un poco más allá, hay una pared de coral. Todo está lleno de peces. Cuando estábamos nadando, venían bancos de peces, o de repente veíamos varios peces tropicales envolviéndonos... Ixai no paraba de decir: “¡Esto es el paraíso!” ;))) Hacer snorkel ahí es un lujo, es como nadar dentro de un aquarium. ;D De todos los pececillos y coral que vimos, nos quedamos con la tortuga y el lionfish.
Besoooosss
P.D. No tenemos fotos porque ni fotos hicimos. ¡Ups!

miércoles, 1 de agosto de 2012

Yogyakarta

Yogyakarta es una ciudad bohemia, llena de arte batik en todas sus modalidades y de sus consiguientes vendedores. ¡¡Los mejores amigos de Ixai!! Hasta camisetas del Barça con fondos batik! Ya la primera tarde me dejé engatusar, -e Ixai (¡pobreeee!) no tuvo más remedio que seguirme- a una galería de arte para que nos enseñaran la técnica batik. La explicación estuvo muy bien y los cuadros me encantaron, si no fuéramos a estar viajando 5 meses más algo o muchos algos caen ;)), pero son tan pesados que te hacen hasta perder las ganas de comprar.
Al día siguiente fuimos al majestuoso templo budista Borobudur. Nos emocionó. Imaginar el trabajo que ha debido costar levantar semejante obra de arte es abrumador. Tiene varios niveles, y en cada uno hay miles de mini obras de arte talladas en piedra. ¡Alucinante!
Al día siguiente, fuimos al Kraton, el palacio del Sultan. Preciosos aunque sólo te dejan visitar una milésima parte ya que es su residencia. Nos gustó pero también nos entristeció. ¿¡Cómo puede vivir él rodeado de tanta riqueza cuando su pueblo vive tan mal?! En eso pensábamos mientra acabábamos la visita y de su monarca pasamos a pensar en el nuestro. Con sus cacerías de elefantes o las estafas de su nuero y todo aquello que no sabemos y todavía nos dio más pena. Al final, da igual el país donde, los que tienen el poder abusan de él. (Aunque esperamos que haya excepciones ;D)
Por la tarde habíamos planeado visitar Prambanan, el hermano pequeño de Angkor Wat. Habiéndonos ahorrado el 50% de la entrada en Borobudur pensamos que por el precio de uno bien veíamos los dos. Nuestra idea era ir por la tarde, ver el atardecer y completarlo con el Ramayana ballet. No calculamos bien el tiempo y, al final, tuvimos que pasar del templo e ir al ballet directamente; lo cual acabó siendo una gran elección. El ballet en el templo merece la pena. (Rober apúntatelo ;)) Los trajes son preciosos y la puesta en escena fabulosa, con el templo iluminado como telón de fondo.
Ayer hizo un mes que nos embarcamos en esta aventura. Nos parece que haga meses que somos viajeros pero a la vez el tiempo ha pasado tan deprisa que nos parece increíble. Para celebrarlo y cuidar nuestros cuerpos serranos y sobretodo nuestros pies viajeros, nos dimos un masaje de reflexología. Eso estuvo muuuyyy bien, aparte del hecho de que el “salón” estaba sin techo y a mitad de la sesión relajante se nos cayera polvo de las paredes por encima interrumpiendo nuestro momento de paz…, pero a pesar de ese insignificante detalle estuvo muy bien! ;D Por si eso fuera poco, encontramos jamón dulce y queso!!!! Casi lloramos en el super de la emoción, así que en tres días hemos comido 6 bocadillos de jamón dulce con queso y tomate!!! MMmmmmm… queee riicooosss!! Sí, quizás a vosotros sentaditos en vuestros sofas con la nevera llena de diferentes tipos de queso y pudiendo comer jamón siempre que os plazca os parece una nimiedad, pero para nosotros fue todo un manjar! ;D Como veis, nos estamos cuidando mucho!
Bueno, después de darle vueltas a la cabeza durante 3 días y preguntar a unos y otros, de aquí y allá; nos hemos rascado los bolsillos y nos vamos a Sulawesi. Al parecer, es uno de los sitios más alucinantes de Indonesia… sólo esperamos que valga la pena.
¡¡¡Muchoos besos y abrazos!!!
P.D. Esta entrada la debíamos haber colgado por el día 27... pero como no siempre tenemos wifi, nos hemos retrasado.¡Ups!

En Borobudur

En Borobudur

Haciendo el bobo en Borobudur


Típica callejuela de Yogyakarta con su vendedor incluido ;))

Nos comen los mosquitos... buuuuuu!!!!

Kraton, palacio del Sultán.


Vista de Prambanan desde el teatro

Bailarines en acción

Ixai con dos de los bailarines, más majos ellos!!